Valora, raciona y protege el agua con pequeñas acciones y decisiones de consumo e inversión sustentables. Los fondos de inversión y fondos cotizados (Exchange Traded Funds: ETF) sustentables son una excelente alternativa.
El 71% de la superficie de la Tierra está cubierta de agua, menos de un 3% es agua dulce y de ésta sólo podemos disponer del 1% que se encuentra en el subsuelo, pozos y acuíferos para cubrir nuestras necesidades, el resto del está congelada en glaciares polares y en las zonas altas de cadenas montañosas.
Al ser un recurso finito el riesgo de que la demanda de agua supere a la oferta es algo que se viene manejando desde hace décadas como resultado de la sobrexplotación de acuíferos (aguas de lluvia que se infiltran en el suelo), la emisión de gases y desechos contaminantes, la deforestación y las prácticas agrícolas inadecuadas así como los procesos industriales intensivos en el uso de agua, los imparables procesos de urbanización en zonas de producción hídrica, y el cambio climático que se refleja cada vez más en sequías e inundaciones extremas.
En este contexto, es urgente reducir la huella hídrica de los seres humanos; esto es, el volumen total de agua dulce utilizado para producir los bienes y servicios que consumimos. ¿Qué podemos hacer cada uno de nosotros para cuidar y preservar el vital líquido?
Pequeñas acciones… grandes resultados
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) una persona requiere de 100 litros de agua al día para satisfacer sus necesidades ¿consumes más? instala llaves y regaderas ahorradoras, reutiliza el agua de la ducha para el WC, atiende y reporta con prontitud fugas de agua, instala sistemas de recolección de aguas de lluvia, utiliza baños secos (WC que no utiliza agua), reduce el tiempo que utilizas en ducharte y cepíllate los dientes con un vaso de agua. También, puedes instalar paneles solares para satisfacer tus necesidades de energía. Bueno, seguramente a ti se te ocurrirán muchas más acciones.
¿Sabías que para producir una hamburguesa se requieren 2,400 litros de agua (crianza de la vaca, cultivo de vegetales y granos para producir el pan y el traslado al punto de venta), y que para un litro de leche se necesitan 1,000 litros de agua? Prácticamente todos los bienes y servicios que consumimos involucran el uso de agua que no vemos (agua virtual).
Para hacer un consumo responsable del agua como consumidores los expertos ambientalistas recomiendan elegir alimentos locales producidos cerca de nuestras comunidades y tener en cuenta el ciclo de vida de los productos que adquirimos y usamos, así como el agua necesaria para su producción, reparto y deshecho. Por ejemplo, la fast fashion (ropa de baja calidad y poco durable) que comercializan varias cadenas globales de ropa requieren 2,700 litros de agua para fabricar una camisa de algodón y producen prendas en cantidades industriales.
Por cierto, desde 1993 se celebra cada 22 de marzo el Día Mundial del Agua, y en este 2022 su lema fue “Hacer visible lo invisible”.
El impulso que las instituciones financieras le están dando a las oportunidades de inversión sustentables conocidas como ESG (ASG por sus siglas en inglés) que además del análisis financiero tradicional involucra temas sociales, ambientales (como el uso del agua y el manejo de desechos), y de gobierno corporativo tiene mucho que ver con la inquietud y el creciente interés de las personas por cuidar el planeta y preservar los recursos naturales como el agua, por lo que buscan invertir en empresas rentables que se apeguen a sus intereses y convicciones como ciudadanos del mundo. En Skandia puedes encontrar productos de inversión ESG como para diseñar tus estrategias de inversión de corto, mediano y largo plazo.
Ser una empresa ESG le permite a una corporación anticiparse a aspectos que pueden poner en riesgo su supervivencia y los recursos de sus inversionistas, por ejemplo, conflictos con la comunidad en la que se ubican, acciones judiciales, deterioro de la imagen de la marca, limitación de crecimiento del negocio, etcétera.
Se estima que para el año 2030 el suministro de agua será solo capaz de satisfacer el 60% de la demanda global en promedio. Los riesgos por la escasez del agua son su encarecimiento, el tener que ajustarse a regulaciones cada vez más estrictas en cuanto su uso, y exponerse a una mayor competencia por disponer del vital líquido para continuar operando. Por ello, la eficiencia en el uso del agua está cada vez más presente en las estrategias de crecimiento empresarial sostenible sin dejar de lado su rentabilidad financiera.
Cabe mencionar que la Organización Internacional de Normalización (ISO) aprobó en el año 2015 la norma ISO 14046: 2014 que especifica los principios, requisitos y directrices relacionados con la evaluación de la huella hídrica de productos, procesos y organizaciones basados en la evaluación del ciclo de vida (ACV).
Si ya eres cliente de Skandia, acércate con tu asesor financiero y pregunta por esta opción de inversión para que se aplique a tu plan.
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