¿Cómo cierras el año financieramente? Si estas satisfecho con el balance, felicidades. Si te encuentras lejos de lo que visualizaste al iniciar 2023 tómate un tiempo para analizar e identificar los malos hábitos financieros que has seguido y que terminaron por frustrar tus objetivos financieros. Comprométete a corregirlos y mejora la administración de tu dinero.
Modificar un hábito no es fácil pero tampoco imposible, a mediano y largo plazo verás sus beneficios en la salud de tus finanzas, pero también en tu bienestar físico y mental.
Aquí te presentamos 12 malos hábitos financieros que puedes corregir con decisión y disciplina:
Un fondo de emergencia es tu red de seguridad financiera porque te da la certeza de tener los recursos necesarios para enfrentar gastos imprevistos sin alterar tus planes de ahorro e inversión (generación de riqueza) ni tener que recurrir a créditos de alto costo (por ejemplo, tarjetas de crédito). Lo recomendable es que sea el equivalente a tres o seis meses de gastos.
Esta herramienta de planeación y administración del dinero es básica para identificar tus gastos, los rubros a los que destinas más recursos y los que son susceptibles de reducir para incrementar tu capacidad de ahorro-inversión. No hacerlo es la mejor receta para incurrir en malos hábitos financieros que desequilibren tus finanzas.
No se trata de ahorrar para acumular dinero sino de ahorrar para generar riqueza a través de la consecución de objetivos financieros y metas patrimoniales. Escríbelas, ordénalas por orden de importancia, ponles plazo y plantea una estrategia de ahorro e inversión para conseguirlas. Intégralas a tu presupuesto con ahorro programado.
No planear tus compras puede dejar un gran agujero en tu bolsillo y restarte capacidad financiera para alcanzar tus metas. Planea tus compras, lleva una lista con los productos que necesitas y apégate a tu presupuesto. Si algo no está en tu lista, antes de comprarlo, pregúntate si lo necesitas o lo deseas.
Si dejas que tus deudas se acumulen y solo abonas el pago mínimo cada mes, terminarás pagando más intereses con el tiempo y retrasando su liquidación y ahogando tu capacidad de pago. Si ya tienes problemas para pagar has un plan de pago comenzando con la de menor importe o por la que cobra intereses más elevados.
El nivel de endeudamiento adecuado, que no genera cuellos de botella en tu flujo de efectivo mensual, es entre 35 y 40% de tu ingreso bruto (antes de impuestos).
Si tu ahorro se reduce a lo que “sobro” de tus gastos al final del mes, difícilmente podrás generar riqueza y adquirir este vital hábito. Plantéate una meta de ahorro y calcula la cantidad mensual que necesitas ahorrar, sepárala de tu cheque de pago y ajusta tus gastos al remanente. Si te es difícil hacerlo prueba a elegir opciones de ahorro e inversión con cargo automático a tu tarjeta de débito.
Analizar rendimientos, comisiones y gastos de distintos instrumentos e instituciones financieras te permitirá elegir las opciones más redituables (más rentables y menos costosas). Tómate tu tiempo para hacer esta tarea, te sorprenderán las grandes diferencias que puedes encontrar. No hacerlo significa renunciar a una capitalización más rápida de tu dinero.
Las tarjetas de crédito tienen el potencial de causar grandes estragos en tus finanzas e historial crediticio cuando se usan de manera incorrecta por su elevado costo financiero; por ejemplo, usarla como extensión del ingreso, atrasarte en su pago, abonar solo el pago mínimo, disponer de efectivo, etcétera.
El uso inteligente del crédito revolvente tiene muchas ventajas, utilízalo con responsabilidad, información e inteligencia.
Si gastas más de lo que ganas significa que manejas tu dinero sin un plan y que tienes que pedir prestado para terminar el mes. Este es uno de los indicadores más claros de que necesitas mejorar tus hábitos financieros y elaborar, con urgencia un presupuesto.
No pagar a tiempo o dejar de pagar tus créditos y hasta algunos servicios son hábitos que pueden afectar tu historial crediticio y limitar tu acceso al crédito bueno (hipotecario, empresarial, entre otros) e incluso cerrarte la puerta a mejores oportunidades laborales.
La generación de riqueza pasa por el hábito del ahorro y llega al desarrollo y habilidad para poner a trabajar el dinero en opciones que sumen valor en el tiempo a tu dinero y esto se logra invirtiendo en los instrumentos idóneos y en los plazos correctos para cada de tus metas.
Gastos, ahorros e inversiones son temas que deberían ser abordados en pareja para obtener mejores resultados en las inversiones, y llevar un eficiente control de los gastos. No ser honestos en el terreno financiero puede conllevar un alto costo patrimonial.
Suma a la corrección de estos 12 malos hábitos financieros la buena costumbre de dedicar tiempo a incrementar tu cultura financiera.
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